miércoles, 8 de diciembre de 2010

Nunca olvidaré...

... el sabor de tus lágrimas.

Aquella noche en la que todo era alegría y diversión, aquella noche en la que tú y yo nos veríamos de madrugada, aquella noche en la que íbamos a estar juntos y a pasarlo bien hasta el amanecer... quedó truncada con un amargo recuerdo para los dos... Ella se acercó a ti y sin más que una mirada te besó, aprovechándose de la situación te besó, aún sabiendo que estabas conmigo te besó... momento en el que tu noche comenzó a brillar con menos fuerza. Aún recuerdo cómo me lo dijiste, el miedo a perderme que desbordaba tu mirada, la rabia que sentías porque otra había besado tus labios... Tus lágrimas brotaban con tal fuerza por la rabia que sentías hacia ti mismo, no te dabas cuenta de que tú hiciste lo correcto: no le seguiste el juego. Y aunque me desgarre el alma pensar que otra ha besado esos labios sé que te importo más de lo que nunca me llegarás a decir, sé que nunca entenderás por qué no me enfadé contigo o tal vez por qué no me enfadé en general, pero como siempre te digo la experiencia es un grado, y yo en estos casos tengo mucha.

Nunca pierdas esa sonrisa que me da la vida.